Para clasificar un vino, se mira si es joven y listo para beber, o si es de reserva. Un vino reserva tiene tiempo adicional de maduración en roble. Esta etapa le da más sabor, aromas y un perfil más fuerte al vino.
Después de la etapa en barrica, estos vinos se guardan más tiempo en la bodega. Durante este periodo, mejoran en sabor y se vuelven más suaves. Así, se convierten en bebidas sofisticadas, ideales para acompañar platos especiales.
Ideas clave
- Los vinos reserva y gran reserva se diferencian de los vinos jóvenes por su mayor tiempo de crianza en barrica.
- La crianza en barrica otorga a los vinos reserva y gran reserva mayor estructura, complejidad aromática y gustativa.
- Los vinos reserva y gran reserva requieren un período de guarda adicional para lograr su máxima expresión.
- La clasificación de vinos reserva y gran reserva está regulada en Argentina con requisitos mínimos de crianza.
- Los vinos reserva y gran reserva son ideales para maridar con platos más elaborados y de sabores intensos.
Introducción a los vinos reserva y gran reserva
Hay varias maneras de clasificar los vinos. Una de las más interesantes es distinguir entre los vinos jóvenes y los reserva. Los vinos jóvenes son para beber de inmediato. Tienen sabores a fruta, son fluidos y frescos. También son ligeros, con buena acidez y se beben fácil.
Por otro lado, los vinos reserva ofrecen otra experiencia. Estos son más estructurados y tienen más cuerpo. Son voluminosos en boca y se consideran elegantes y complejos.
Clasificación de los vinos según su crianza
Los vinos jóvenes son frescos y fáciles de beber, perfectos en cualquier momento. Vienen con sabores a frutas, como melocotones y bayas. Tienen una acidez refrescante y son muy ligeros.
Los vinos crianza destacan por su riqueza y estructura. Han pasado por un proceso de envejecimiento en barricas de roble. Esto les da sabores más complejos y un toque ahumado.
Los vinos reserva aportan una experiencia más elegante y rica. Han madurado en barrica y botella más tiempo. Tienen una complejidad única con sabores intensos como vainilla y cacao.
Finalmente, los vinos gran reserva ofrecen lo máximo en calidad. Con las más largas crianzas, encuentras vinos superiores de alta gama. Tienen sabores profundos y una textura sedosa que denota su cuidadoso proceso de elaboración.
Proceso de fermentación y envejecimiento
Los vinos jóvenes se hacen fermentando en tanques de acero. Luego, están en esos tanques o piletas de cemento antes de ser embotellados. En cambio, los vinos reserva y gran reserva pasan un tiempo en barricas de roble durante la fermentación. Esto añade complejidad. Los Chardonnay de crianza a veces fermentan solo en barricas.
Fermentación de vinos jóvenes
La fermentación de los vinos jóvenes es breve y a baja temperatura. Así, se mantienen la frescura y fruta de las uvas.
Fermentación de vinos reserva y gran reserva
Los vinos reserva y gran reserva fermentan más tiempo y a más calor. Esto les da mayor estructura y complejidad. Adicionalmente, una parte de la fermentación sucede en barricas de roble. Esta técnica añade sabores a especias y madera al vino.
Uso de barricas y madera de roble
La diferencia clave entre los vinos jóvenes y otros tipos está en las barricas de roble. Los vinos jóvenes raramente se guardan en madera. Por otro lado, los vinos reserva y gran reserva sí. Este paso prolongado en barricas les da sabores y aromas únicos.
Vinos jóvenes y barricas
Los vinos jóvenes no se envejecen en barricas o lo hacen poco, menos de 6 meses. Eso les ayuda a mantener la frescura y sabor de la fruta.
Vinos reserva y gran reserva en barricas
En cambio, los vinos reserva y gran reserva sí pasan mucho tiempo en barrica. Usan tanto barricas nuevas como usadas. La madera les da su estructura y crean sabores complejos. El tiempo y el tipo de barrica marcan su estilo único.
Tiempos de crianza mínimos
Los vinos jóvenes apenas pasan por madera, y si lo hacen no es más de 6 meses en barricas usadas. En cambio, los vinos reserva se guardan en barricas por más de 10 o 12 meses. Los vinos gran reserva esperan aún más para salir, con por lo menos 24 meses si son tintos, y 12 meses si son blancos o rosados.
Tiempo de crianza de vinos jóvenes
Los vinos jóvenes, también llamados «Robles», solo necesitan de 3 a 6 meses en barrica. Durante este tiempo, desarrollan notas de madera. Sin embargo, estas notas no son lo más fuerte en su sabor.
Tiempo de crianza de vinos reserva
En cambio, los vinos reserva deben esperar al menos 3 años antes de salir. De estos, pasan al menos 12 meses en barrica. El resto del tiempo lo pasan guardados en botella. Así, se vuelven más estructurados, complejos y elegantes.
Tiempo de crianza de vinos gran reserva
Para los vinos gran reserva, el tiempo de espera es de unos cinco años. De ese tiempo, al menos 18 meses los pasan en barrica. No obstante, el tiempo de barrica es diferente para los blancos y rosados. Con tanto tiempo, logran una madurez y sofisticación difíciles de igualar.
Características organolépticas diferenciales
Los vinos jóvenes se caracterizan por ser jugosos y frescos, con un toque ácido. Están listos para beberse rápido y dan una sensación de alegría.
Los vinos reserva tienen más cuerpo que los jóvenes. Además, son más elegantes y complejos debido a su tiempo en barrica. En ellos, encontrarás sabores más maduros, junto a toques de especias y frutos oscuros.
Por último, los vinos gran reserva son los más complejos y sofisticados. Tras una larga crianza, destacan por su variedad de aromas y sabores. Desde frutos secos hasta cuero y tabaco, ofrecen una experiencia gustativa única. Su textura es suave y refinada.
Características | Vinos Jóvenes | Vinos Reserva | Vinos Gran Reserva |
---|---|---|---|
Aromas | Notas frutales, florales y herbáceas | Aromas más maduros, con notas tostadas, especiadas y de frutos negros | Gran riqueza aromática, con matices de frutos secos, cuero y tabaco |
Cuerpo y estructura | Ligereza, frescura y acidez | Mayor estructura, cuerpo y volumen de boca | Volumen untuoso, taninos más pulidos |
Complejidad | Sencillez y vivacidad | Mayor elegancia y complejidad | Máxima sofisticación y madurez |
Cada tipo de vino ofrece una experiencia distinta. Desde fruta fresca hasta aromas complejos, hay variedad para todos los gustos. Esto permite elegir el vino perfecto para cada ocasión.
¿Qué es un vino reserva y gran reserva?
Vinos reserva y gran reserva son tipos especiales de vino. Se crían mucho tiempo en barricas de roble. Esto les da más sabor, aroma y profundidad. Comparados con los vinos jóvenes, toman más tiempo para estar listos.
Los vinos reserva pasan por más etapas de preparación. Necesitan un periodo extra para que sus cualidades se destaquen. Por eso no son para beberse tan rápido como los vinos jóvenes.
Regulación argentina de vinos reserva y gran reserva
Argentina tiene reglas especiales para vinos reserva y vinos gran reserva. Estos requisitos aseguran la calidad y el proceso adecuado de envejecimiento. Así, se reconoce la distinción de estos vinos.
Requisitos para vinos reserva tintos
La ley manda que los vinos reserva tintos se críen al menos 12 meses en barrica de roble. Pasar este tiempo les da más estructura, ricos sabores y aromas complejos.
Requisitos para vinos reserva blancos y rosados
Los vinos reserva blancos y rosados requieren 6 meses en barrica de roble. Esta guarda corta les añade elegancia y sutili
Requisitos para vinos gran reserva tintos
Para ser vinos gran reserva tintos, deben envejecer en roble al menos 24 meses. Este largo tiempo les da complejidad y sofisticació.
Requisitos para vinos gran reserva blancos y rosados
Los vinos gran reserva blancos y rosados necesitan 12 meses en barrica de roble. Así, consiguen una estructura única y gran elegancia.
Variedades autorizadas para reserva y gran reserva
Se permite usar ciertas uvas para vinos reserva y gran reserva. Para tintos, son Malbec, Merlot, Cabernet Sauvignon y Syrah. Para blancos y rosados, incluyen Chardonnay, Chenin, Sauvignon, Riesling y Gewürztraminer, entre otras.
Tipo de vino | Tiempo mínimo de crianza en barrica | Cantidad mínima de uva por 100 litros de vino |
---|---|---|
Vinos reserva tintos | 12 meses | 135 kg |
Vinos reserva blancos y rosados | 6 meses | 135 kg |
Vinos gran reserva tintos | 24 meses | 140 kg |
Vinos gran reserva blancos y rosados | 18 meses | 140 kg |
Se aplica a partir de la cosecha 2011. El objetivo es asegurar calidad y el correcto envejecimiento. Todo esto en los reserva y gran reserva de Argentina.
Reserva y gran reserva en otras regiones vitivinícolas
En países como España, los términos vinos reserva y gran reserva son usados de manera especial. Los vinos reserva deben tener al menos 3 años de preparación. De estos, 12 meses deben pasar en una barrica. Mientras que los gran reserva necesitan 5 años de cuidado, con 18 meses en barrica. Las reglas cambian según la región.
Por ejemplo, un vino de reserva en el Piamonte, Italia, madura primero en barricas de roble por 2 años. Posteriormente, en botella al menos 6 meses. En Chile, un vino de reserva pasa 6 meses en barricas de roble. Mientras que un vino de gran reserva chileno necesita 1 año en barrica y 1 año en botella.
Por lo general, los vinos de gran reserva son más costosos. Esto se debe a su extenso proceso de envejecimiento y a la excelente calidad de las uvas. En sitios como Borgoña, Francia, usan términos como climats, Premier Cru, o Grand Cru. Prefieren esto como señal de calidad y longevidad en el vino, en lugar de «Reserva» y «Gran Reserva».
Maridajes recomendados
Los vinos jóvenes van bien con platos que comemos a menudo, como carnes magras al horno y vegetales grillados. También se llevan bien con pollo a la portuguesa, milanesas y pastas con salsa de tomate. Para los vinos reserva es mejor elegir platos más cargados y con sabores fuertes.
Entre estos están el risotto con hongos de pino, cortes de carne con hueso a la parrilla y cordero asado. Las pastas con salsa boloñesa son otra buena opción para acompañarlos.
Maridajes para vinos jóvenes
Los vinos jóvenes se llevan bien con platos sencillos y del día a día. Estos incluyen carnes magras al horno con vegetales, pollo a la portuguesa y milanesas con puré. Las pastas simples con salsa de tomate también combinan perfectamente.
Maridajes para vinos reserva
Para los vinos reserva, que tienen más estructura, es mejor elegir platos con más complejidad. Entre las opciones se encuentran el risotto, cortes de carne a la parrilla y cordero asado. También van bien con pastas que tengan una salsa boloñesa sustanciosa.
Maridajes para vinos gran reserva
Un vino gran reserva es especial y merece un plato a su altura. Se recomienda maridarlo con asados de caza. Así, se realzan los sabores tanto del vino como de la comida de hoy.
Cómo guardar y servir vinos reserva y gran reserva
Los vinos reserva y gran reserva necesitan especial cuidado. Han pasado mucho tiempo guardados y envejecidos. Por eso, es clave seguir protegiéndolos en casa. Lo mejor es mantenerlos en un sitio fresco, oscuro y con humedad controlada.
También, decanter estos vinos antes de servirlos. Así, reciben aire y revelan su sabor completo.
La temperatura ideal de servicio para los vinos reserva y gran reserva va de 16 °C a 18 °C. Es esencial acondicionarlos previamente. Así evitamos variaciones bruscas de temperatura al servirnos.
Hay una observación para los vinos tintos reserva y gran reserva. Necesitan más calor. De este modo, liberan todos sus ricos aromas.
Tipo de Vino | Temperatura de Servicio |
---|---|
Vinos blancos | 6 a 14 grados |
Vinos tintos | Temperatura ambiente, recomendado 13-14 grados en verano |
Vinos reserva y gran reserva | 16 a 18 grados |
Un buen truco es abrir el vino tinto de 30 minutos a una hora antes de beberlo. Así, coge aire y mejora su sabor y olor. Otra tip es llenar solo dos tercios las copas de vino blanco y rosado, y a la mitad las de tinto. Esto ayuda a disfrutarlo mejor.
Usar un aireador o decantador puede hacer más placentero el momento de beber. Al finalizar, tapa la botella con un tapón especial para hacer el vacío y no dejar entrar oxígeno.
Recomendaciones de vinos reserva y gran reserva argentinos
Argentina es famosa por sus vinos de alta calidad. Entre ellos, destacan los vinos reserva y gran reserva. Aquí tienes algunas sugerencias para saborear estos vinos de crianza y guarda.
Vinos reserva tintos recomendados
El Gran Famiglia Bianchi Malbec es muy especial. Tiene un aroma intenso a frutas rojas y notas a especias. También encontrarás toques de vainilla y chocolate. Es un vino tinto reserva que destaca por su cuerpo y sabor.
Vinos reserva blancos recomendados
Para los fans de los blancos, recomendamos el María Carmen Bianchi Chardonnay. Tiene notas de frutas cítricas y minerales. Además, enriquecido con la vainilla de su paso por barrica.
Vinos gran reserva tintos recomendados
El Génesis Malbec es un vino gran reserva tinto que vale la pena probar. Ofrece aromas a frutas rojas maduras y flores. Ha envejecido más tiempo, lo que lo hace complejo y maduro.
Vinos gran reserva blancos recomendados
El Bianchi Varietales Malbec se destaca entre los blancos gran reserva. Es fresco y vivo, con una crianza que añade estructura. Un vino blanco que no te decepcionará.
Conclusión
Los vinos reserva y gran reserva son diferentes a los vinos jóvenes por su tiempo en barricas de roble. Esto les da estructura, complejidad aromática y gustativa. En cambio, los vinos jóvenes se destacan por ser frescos y frutales.
Los reserva y gran reserva logran una sofisticación y madurez superiores por su largo envejecimiento. Esta forma de clasificar vinos es muy común. Ayuda a entender sus diferentes estilos.
El envejecimiento en barricas de roble es crucial para los vinos reserva y gran reserva. Aporta estructura, cuerpo y complejidad. Gracias a esto, alcanzan una elegancia y sofisticación difíciles de igualar por los vinos jóvenes.
La categorización de vinos reserva y gran reserva es muy conocida en todo el mundo. Muestra la evolución y maduración de los vinos. Conocerla permite a los amantes del vino explorar una amplia gama de estilos y expresiones. Así, pueden encontrar sus vinos ideales para disfrutar & maridar.
FAQ
¿Qué es un vino reserva y un vino gran reserva?
Los vinos reserva y gran reserva son de alta calidad. Esto se debe a su crianza prolongada en barricas de roble. Esta crianza les da una estructura fuerte y un sabor y olor más complejos. Un vino se llama reserva cuando ha estado en barrica entre 10 y 12 meses. Un gran reserva pasa aún más tiempo, al menos 24 meses si es tinto.
¿Cuáles son las principales diferencias entre los vinos jóvenes, reserva y gran reserva?
Los vinos jóvenes son frescos y ligeros, con mucha fruta en su sabor. En cambio, los reserva y gran reserva son más fuertes y complejos. Tienen un cuerpo más robusto y han pasado más tiempo en barricas de roble.
¿Cómo se diferencian los procesos de fermentación y envejecimiento de los diferentes tipos de vinos?
Los vinos jóvenes se fermentan en vezos de acero inoxidable. Pero los reserva y gran reserva pueden también tener una parte de su fermentación en barricas de roble. Esto les aporta toques de complejidad. Su envejecimiento en barricas es más largo, lo que los distingue.
¿Cuáles son los tiempos de crianza mínimos requeridos para los vinos reserva y gran reserva en Argentina?
En Argentina, para ser reserva, los vinos tintos necesitan 12 meses de barrica. Los vinos blancos y rosados solo 6 meses. Para ser gran reserva, los tintos deben madurar 24 meses en barrica. Y los blancos y rosados, 12 meses.
¿Cómo se diferencia la clasificación de vinos reserva y gran reserva en otras regiones vitivinícolas?
En lugares como España, la regulación para los reserva y gran reserva es más detallada. Los reserva requieren al menos 3 años de elaboración, con 12 meses en barrica. Los gran reserva, en cambio, necesitan 5 años para ser, con 18 meses en barrica.
¿Cuáles son los maridajes recomendados para los diferentes tipos de vinos?
Los jóvenes van bien con comidas diarias como pollo y pasta. Por otro lado, los reserva y gran reserva se disfrutan más con platos intensos. Entre ellos están risottos, carne asada, y cordero.
¿Cómo se deben guardar y servir los vinos reserva y gran reserva?
Es vital mantener estos vinos en buenas condiciones. Para ello, se recomienda un lugar fresco, oscuro y con humedad controlada. Antes de servir, decantarlos ayuda a que expresen mejor su sabor y aroma.