El vino entre páginas: cuatro libros que no podés dejar de leer

Recomendamos cuatro libros de ágil lectura para aprender todo sobre el mundillo vinófilo, tanto para principiantes como expertos

¡Hola Vino!

La genial sommelier Agustina de Alba, con mucha sapiencia, propone una aproximación simple, directa y sencilla al mundo del vino, “sin muchas vueltas”, según nos cuenta. 

Es un libro fresco, dinámico, diferente, con la eximia visión de la joven y talentosa profesional, que fue elegida Mejor Sommelier de la Argentina 2008 y 2012. 

Se trata de una guía súper práctica para elegir, beber y disfrutar el vino, desde la uva hasta el paladar. Con el valioso aporte de enólogos, sommeliers y profesionales afines, el texto brinda herramientas indispensables y concretas para aprender todos los secretos de nuestra bebida nacional.

Ideal para conocer más sobre etiquetas vínicas, el libro es también un muy buen puntapié inicial para no paralizarse a la hora de ver la infinita oferta en el mercado.

Asimismo, Agustina nos invita a descubrir el mejor vino para un asado, para acompañar pastas, pescados y carnes blancas.

Si querés quedar bien en una primera cita, almuerzo familiar, cena con amigos entrañables, reunión de negocios o, simplemente, buscás un exponente para disfrutar en soledad y no sabés cuál es el indicado, he aquí las soluciones a las inquietudes.

En definitiva, es un compendio muy valioso, lleno de consejos que te explican dónde comprar, cómo elegir, guardar, servir y acompañar el vino. Un aprendizaje en leguaje llano que va desde la elaboración hasta la cata.

 

Más allá del Malbec

Atípico y simpático libro sobre vinos. Un entusiasta amateur charla con uno de los mayores especialistas de la Argentina y, juntos, recorren la experiencia vinófila de un modo vital y conceptual, a la vez, con mucha información y sin preconceptos. Ambos tienen muchas ganas de experimentar y de no caer en los lugares comunes de las tediosas “notas de cata”.

 

Durante varios meses, Andrés Rosberg (sommelier) y Quintín (crítico de cine) se reunieron diariamente para conversar “sin dogmas” sobre vinos. Como viven en ciudades diferentes, a excepción de un número limitado de encuentros en Buenos Aires, las pláticas se dieron en un documento de Google en el que uno preguntaba, el otro respondía, el primero arriesgaba una hipótesis, el otro la refutaba y así sucesivamente.

Lo inusual del método de trabajo dio como resultado un libro de igual modo singular, un auténtico fuera de serie: hay aquí una cantidad enorme de conocimientos y de reflexión sobre los vinos argentinos (más allá del Malbec, como bien reza el título), un manual de instrucciones para saber de qué hablamos cuando hablamos de vino, de cepajes, de terruños o de taninos.

 

Al mismo tiempo, en un mundo lleno de jerga, sobreentendidos y publicidades disfrazadas de información, no se mencionan bodegas ni marcas. Pues, no hace falta: la riqueza del vino, el grandísimo maridaje entre su extrema sofisticación y la placidez que encierra el sencillo hecho de disfrutarlo hacen de este libro luminoso un acto de justicia.

 

Oro en los viñedos

Bill Harlan ganó su primer dólar con el vino a los 20 años de haber creado Harlan Estate (y planifica sus viñedos para los próximos 200 años); las raíces de la italiana Antinori se remontan a la Guerra de Troya y la misma familia elabora los vinos desde hace 26 generaciones; una botella de Chateau D’Yquem flota en el espacio, ya que fue transportada por un astronauta francés; Adrianna Vineyard, a 1450 metros sobre el nivel del mar, es resultado de la simple decisión de Nicolás Catena Zapata de “tomar el riesgo”, porque “si no lo probamos, nunca sabremos el límite del frío”.

 

“Oro en los Vñedos”, de Laura Catena, es un libro excepcional, lleno de estas historias encantadoras que dieron la vuelta al mundo. Sin embargo, no es un texto de recopilación de anécdotas, sino una gran fuente de inspiración para los amantes del vino, desde los productores que pretenden dejar su huella hasta los consumidores que disfrutan del esfuerzo de la pasión de dichos elaboradores.

 

Con formato de libro ilustrado y un sinfín de elementos de lectura rápida que alivian y estimulan al lector, el volumen resume las historias de Lafite Rothschild, Solaia, Chateau D’Yquem, Viña Tondonia, Harlan Estate, Romanée-Conti (1,8 hectáreas de viñedos que son Patrimonio de la Humanidad de la Unesco), la alemana Wehlener-Sonnehuhr, Leflaive Montrachet, la australiana Hill of Grace, Sori San Lorenzo, La Mouline y Adrianna Vineyard.

 

A través de las líneas solemnemente escritas por la descomunal Laura Catena, uno siente que aprende, desarrolla respeto por todas las grandes marcas y siente los mayores deseos de probar todos esos néctares. La combinación es imbatible. ¡Salud!

 

Hasta el agua de los floreros

¿El vino blanco da dolor de cabeza? ¿La burbuja del espumante, cuanto más chica, es mejor? ¿Los tintos van con carnes y los blancos se entienden con pescado? Si tenés preguntas sobre el vino o las bebidas espirituosas, el libro de la meticulosa Fernanda Orellano, Directora Académica de la Escuela Argentina de Sommeliers, tiene las respuestas correctas.

Bajo una mirada didáctica y entretenida, “Hasta el agua de los floreros” aborda el mundo del vino, las bebidas y los productos gourmet planteando un recorrido por sus historias, geografías, usos y culturas que los rodean. Aperitivos, burbujas; tintos, blancos y rosados; cervezas, destilados, ron, tequilas y licores son los protagonistas de páginas dinámicas y amenas para el lector. 

Orellano aborda todas las bebidas, sus etimologías y diferencias, además de enumerar propuestas simples de consumo, maridajes y tragos, haciendo hincapié en el arte de beber con moderación (mensaje que se debe repetir una y otra vez para generar conciencia del consumo medido.

En definitiva, estamos en presencia de un libro que, por su estética moderna, es ideal para el foodie/gastronómico ávido de conocimiento y entusiasmado por beber y comer cada vez mejor.

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